Familia

Familia. Una palabra compuesta por sólo 7 letras, 3 sílabas y 4 vocales, pero en realidad concepto engloba algo mucho más grande. ¿Es sólo los lazos de sangre lo que une a estas personas, sólo algo tan insignificante como eso? yo digo que no. Algo tan vulgar como el ADN no puede compararse con la palabra en sí, decir que familia sólo une a las personas que comparten rasgos consanguíneos es como decir que fruta sólo significa manzana, esta palabra normalmente sobrevalorada no es eso únicamente.

Una familia es algo que llega más allá de los lazos creados por el parto, la vivencia en un mismo lugar o el compartir un pariente, la familia tiene también que ver con las personas a las que tú quieres, las que te apoyan y lo más importante, las personas que tu aprecias. Sí es cierto, la familia con la que naces no se puede elegir pero eso no significa que sólo debes conformarte con este reducido grupo de personas, a lo largo de tu vida conocerás a muchas personas maravillosas y formaras lazos de confianza, amistad e inclusive de amor, estas personas pueden llegar a significar tanto para ti y tu para ellas, que de alguna manera antes de que te des cuenta te conviertes en parte de su familia y ellos de la tuya.

Un claro ejemplo de esto son las relaciones que existen desde la infancia, esto se debe a que las personas se conocen tan bien que inclusive la misma sociedad da por hecho que una unión así sólo podría ser entre hermanos. De igual manera me ha tocado ver que los individuos que viven o se desarrollan la mayor parte del tiempo en un mismo hogar aún cuando uno no pertenezca a la familia pueden llegar a ser fácilmente reconocidos como hermanos.

Pero no siempre se necesita buscar un familiar fuera del hogar, las personas con las que te desarrollas todos los días en la casa (comúnmente conocida como familia) también tienen muchas cosas por ofrecerte, a veces sólo tienes que buscar, quizás no les guste todo lo que a ti te gusta pero por que no compartir un poco de lo que a ti te gusta con ellos, y ver si a ellos le llama la atención, si les interesa y si pueden compartir un poco de tiempo de esta manera ya que el tiempo de familia nunca está de más.

Sobre los padres, qué te puedo decir, no siempre son lo mejor y muchas veces nos tocan los peores pero hay que intentar entenderlos, recuerda que siempre están bajo presión y muchas de las decisiones que toman no fueron razonadas lo suficiente o fueron hechas con alguna emoción fuerte que pudo haber nublado su juicio en ese momento, por lo que te recomendaría no juzgarlos y entender que son humanos al igual que nosotros.

Pueden existir cambios grandes en una familia, sí es cierto pero nunca lo tomes personal. Los cambios muchas veces son para bien y aunque también los hay para mal, es nuestro deber saber identificar si los cambios a realizar benefician la familia o no, y si no los son tratar de arreglarlos siempre que este dentro de tus posibilidades.

Mi último consejo sería que nunca pienses que estás solo, que siempre tienes una “familia” aún cuando no esté conformada por tu padre, madre o hermanos, siempre tendrás un amigo, un maestro, entrenador o alguien que te quiera y se preocupe por ti, pero también siempre intenta disfrutar de los tiempos en familia ya que son momentos gratos y nunca está de más pasártela bien en familia.

Por Edmundo Reynoso